
¿Quieres tener el rostro terso y libre de impurezas? Pues usa el café en polvo una vez por semana, te servirá como un excelente exfoliante y dejará tu rostro como el de un bebé.
Esta técnica es sencilla y tan antigua como nuestras abuelitas y no te quitará mucho tiempo, pero los resultados no los podrás creer.
Lo que tienes que hacer es tomar un poco de café nuevo, o también, si eres muy amante de esta bebida y no quieres desperdiciar ni un grano, deja secar los restos que quedan en el colador o la cafetera eléctrica.
A continuación, con el rostro húmedo aplica tu gel limpiador o jabón de costumbre hasta que haga espuma y después toma el café y frota tu rostro suavemente y con movimientos circulares para lograr el efecto de limpieza profunda.
Deja actuar por unos minutos y luego aclara con agua. Seca tu rostro y aplica tu crema hidratante preferida. Es recomendable que este tratamiento, que también puedes aplicar en todo el resto de tu cuerpo, lo realices una vez por semana sin falta, sólo así garantizarás buenos resultados.