
La principal infección que afecta las uñas de forma grave y en ocasiones irreparable si no se atiende a tiempo, es la onicomicosis. Se trata de una propagación de hongos que va ocasionando el descoloramiento del área afectada, llegando a tornarse de color blancuzco o amarillento.
A medida que el hongo se hace más profundo al interior de la placa, la uña puede volverse más grande y ocasionar dolor. Los médicos tratan esta afección con antimicóticos, los cuales son muy efectivos, pero pueden ocasionar efectos secundarios como molestias estomacales.
De igual manera es posible tratar la afección con las propiedades antibacterianas y antifúngicos del ajo en combinación con el efecto alcalino del bicarbonato de sodio pueden ser una solución tópica realmente efectiva.
¿Qué necesitas?
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharadas de bicarbonato
- Agua tibia.
Preparación
Machaca muy bien los ajos y reserva. Mezcla el bicarbonato con dos cucharadas de agua hasta forma una pasta y luego incorpora el ajo.
Modo de uso
Lava muy bien la uña afectada y aplica esta pasta encima, déjala actuar durante 30 minutos y retira con abundante agua tibia. Repite este tratamiento 3 veces al día hasta que desaparezca el hongo.
Este tipo de tratamiento por ningún motivo pretende remplazar la opinión de un profesional, en caso de que la afección persista o cause dolor acuda cuanto antes a su médico de cabecera.