
En el pasado quedaron esas dietas desabridas de solo lechuga con pescado fresco, café negro sin azúcar o infusiones en ayunas. Tomar las propiedades y nutrientes de cada alimento son ventajosas para tu cuerpo ¡cómelas! Con recetas ricas y saludables. ¡Te contamos más!
Evita la retención de líquido y disminuye el riesgo de obesidad desayunando avena, este cereal además de saciarte durante horas contiene minerales, vitaminas, proteínas, grasas saludables y fibra. Te ayuda a reducir los niveles de colesterol y previene la hipertensión.
Los alimentos termogénicos como los frutos secos te ayudan a adelgazar. Incluir su grasa es saludable para el organismo. Un puñado de 30 gr diarios es suficiente para aportarte a tu cuerpo proteína y fibra que te mantengan llena durante horas.
¡Los huevos son geniales! Si los consumes en el desayuno te sentirás saciada y llena de energía hasta el mediodía. Por unidad consumes unas 75 calorías, dosis necesaria para el buen funcionamiento del cerebro. Evitan que el hambre o el hastío te hagan abandonar la dieta.
La quinoa es maravillosa por la cantidad de carga proteica que posee, consumirla no solo te sacia por más tiempo sino te ayuda a aumentar la masa muscular y a estimular el metabolismo. ¿Cómo la preparas? Ponla a cocer de 15 o 20 minutos, con dos partes de agua por cada ración de quinoa.
Seguro lo desconocías pero las palomitas de maíz son aliadas para esos momentos donde el hambre ataca. No compres las que se preparan en microondas éstas pierden los nutrientes. Al consumir tres tazas de palomitas preparadas sin grasa te llenarán y tienen menos de 100 calorías.