
Uno de los desayunos preferidos por las personas en gran parte del mundo son las tostadas con mantequilla, pero este alimento esconde tras su delicioso sabor un terrible riesgo: aumenta considerablemente las probabilidades de padecer diabetes mellitus tipo 2.
Un estudio realizado por la revista The American Journal of Clinical Nutrition demostró que las personas que consumen grasas saturadas y de origen animal presentan el doble de riesgo de desarrollar diabetes.
También concluyeron que solo el consumo de 12 gramos de mantequilla (grasa saturada) al día, lo que equivale a una cucharada rasa, aumenta el riesgo de padecer diabetes en un tiempo de 4 años y medio.
Por otro lado, las tostadas hechas con harina de trigo son una fuente de carbohidratos simples cuyo consumo excesivo también aumenta considerablemente las posibilidades de padecer diabetes. Esto ocurre porque las harinas se transforman en glucosa dentro de nuestro organismo.
Aunque la mantequilla es una buena fuente de vitaminas A, D, E, y K, y aporta mucho calcio a nuestro organismo, también está relacionada directamente con la obesidad, enfermedad que se encuentra entre las principales causas de la diabetes tipo 2.