
Debido a la crisis sanitaria y el confinamiento el teletrabajo y el telestudio se han masificado como también la cantidad de horas que permanecemos expuestos a los dispositivos móviles y pantallas de televisión.
Este sobreuso de la visión tiene consecuencias negativas en nuestros ojos que se tornan rojos y se produce cansancio visual, lo que desmejora nuestra eficiencia, productividad y concentración.
La sobreexposición de nuestros ojos en estas largas jornadas de teletrabajo, telestudio o entretención, disminuye la frecuencia del parpadeo y evapora la lágrima que protege y lubrica el globo ocular, por esta razón se enrojecen y se sienten los ojos arenosos.
Para evitar estos problemas una buena opción es seguir la regla 20-20, creada por el oftalmólogo Jeffrey Anshel, que consiste en hacer pausas de 20 segundos cada 20 minutos al menos, para proteger la lubricación y descansar los músculos de los ojos.
Cada 20 minutos debes mirar fuera de la pantalla del dispositivo móvil, del televisor o del monitor, por 20 segundos, tiempo durante el cual deberás fijar la mirada en un objeto que se encuentre a 6 metros para alterar la distancia focal.